Columna de Opinión de Alejandro Barros
El día lunes 2/8/2010 me tocó compartir un panel en el Centro de Sistemas Públicos sobre protección de datos personales en el contexto de una convocatoria conjunta del Centro y del Consejo para la Transparencia. La ley que se encuentra en discusión en estos momentos, pero que según el propio Senador Allamand no tiene paternidad por lo que es poco probable que vea la luz pronto, , pocos días después de decir aquello apareció una noticia más alentadora, si bien plantea discutir donde debe residir la función y al parecer en el Senado gusta más la idea de una nueva institucionalidad.
En el panel la idea era analizar el informe desarrollado por el Centro de Sistemas Públicos, informe en el cual me tocó participar desarrollando las temáticas asociadas al soporte tecnológico requerido, lo que me gustaría destacar de este proceso es el hecho que se abran espacios para analizar los impactos técnico operacionales de las nuevas normativas y legislaciones, lo cual en mi opinión se hace muuuuy poco, y muchas veces vemos proyectos de ley que salen del proceso legislativo e inmediatamente surge la pregunta ¿cómo vamos a hacer para que esto funcione?¿alguien habrá pensado en las complejidades de su puesta en marcha y operación?
En el panel me sentí un poquito apabullado por tanto abogado (no la verdad es que me sentí bastante cómodo), el tema derivó a la discusión de donde debe residir esta función, ¿ampliando las funciones del consejo para la transparencia o bien desarrollando una nueva funcionalidad?, discusión que más allá de mi opinión personal me excede, mis planteamientos estuvieron centrados más en la problemática del soporte técnico operacional que requiere una normativa como esta. La protección de datos personales o sensible es un tema de la mayor urgencia ya que al menos dos iniciativas lo requieren:
Además existen algunos elementos que aún deben ser resueltos, los que veo son: