En un coloquio que realizamos con nuestro equipo, dos destacados académicos nos revelaron dónde se juega el éxito o fracaso de un proyecto.
Hacer proyectos no es una tarea fácil. Así lo afirmaron los dos investigadores asociados a nuestro Centro de Sistemas Públicos, Gastón Suárez y Gastón Held, quienes compartieron sus conocimientos en un coloquio en el que participó nuestro equipo. ¿El título? “Una clave ignorada de los proyectos: el principio es el fin”.
Y es que, en efecto, la evidencia revela que emprender un iniciativa no siempre lleva al éxito. De acuerdo a lo expuesto por los investigadores, un estudio de PWC, que revisó más de 10.000 proyectos de 200 empresas en 30 países y diversas industrias, reveló que solo el 2,5% de las empresas completan exitosamente la totalidad de los proyectos que emprenden.
Otros estudios hechos para industrias específicas reflejan situaciones similares. En el caso de los proyectos de TI y software, por ejemplo, se encontró que el 70% falla ya sea en alcanzar sus objetivos o en el cumplimiento de su presupuesto o plazo, y que ese porcentaje aumenta con el tamaño de la iniciativa. En los grandes proyectos de infraestructura los sobrecostos son habituales, llegando en algunos casos a más que duplicar los presupuestos iniciales.
¿Cuál es el camino, entonces?
Los académicos destacaron que: “Nuestra propuesta frente a esta realidad es que si uno adquiere un punto de vista totalmente nuevo sobre qué son los proyectos en realidad, no solo va a poder revertir en la práctica el fatídico destino de tantos proyectos, sino que también va a poder visualizar el enorme rol que a la disciplina de los proyectos le corresponde ahora asumir como parte de la vida social en crisis. Es decir, la capacidad de concebir y realizar proyectos son ahora una de las claves del futuro inmediato, no sólo de las organizaciones sino también de los países”.
Y agregaron que “parte relevante del fracaso de los proyectos es acometerlos ‘ejecucionalmente’ (…). Pero ahora nos encontramos en otra época, donde los individuos ya no están dispuestos a seguir los dictados de una autoridad sino que quieren ser cada vez más ellos mismos protagonistas de su futuro. Eso pone de relieve que los proyectos, en realidad, son iniciativas humanas para modificar el futuro y, por tanto, la parte medular de un proyecto no es la ejecución sino la concepción”.
Por lo tanto, en esta nueva época, el desafío de los proyectos está fundamentalmente en su concepción, fase germinal aún desconocida por muchas personas. “Cabe mencionar que cada vez más, serán los proyectos no las religiones ni las ideologías la instancia donde se aglutinarán las personas para cambiar el futuro. Por tanto la capacidad de formular proyectos será, cada vez más, un activo precioso de cualquier comunidad humana que progrese”, concluyeron.
Revisa la presentación completa aquí: “Una clave ignorada de los proyectos: el principio es el fin”