Nuestro país enfrenta hoy el desafío de modernizar sus aparatos estatales para entregar a los ciudadanos una creciente calidad de vida. Para esto, se requieren servicios públicos eficientes y orientados a satisfacer las múltiples necesidades de la población, lo cual sólo es posible en la medida que al interior de cada institución existan ejecutivos altamente calificados para enfrentar estos nuevos tiempos.
El Diplomado en Gerencia Pública (DGP) entrega los conocimientos y destrezas que los nuevos directivos públicos necesitan y para profundizar sobre este programa conversamos con el profesor Alejandro Barros, consultor asociado del CSP y experto en TI, quien da cuenta de la importancia que este programa tiene para los profesionales del sector público.
-¿Cuál es el apoyo real que entrega este Diplomado en la formación de profesionales preparados técnica y humanamente en materia de políticas públicas?
-Este programa es un espacio formativo en el cual se entregan herramientas y técnicas que permiten abordar el desafío del gerenciamiento público más preparado. No existe clara conciencia de los desafíos que estos cargos representan, por sus múltiples restricciones, y habitualmente existe una mirada muy simplista de lo que un buen gerente público requiere. Durante el Diplomado se realizan análisis de casos reales y se pone al alumno en situaciones que deberá afrontar en su quehacer, buscando que incorporen las nuevas herramientas y conocimientos adquiridos durante el programa. Otro elemento esencial es que puedan ver las diferentes miradas de una determinada situación y/o caso, a partir de diversas experiencias y formaciones profesionales. Sugiero revisar más antecedentes en mi blog “El Escritorio de Alejandro Barros”, en el post “Gerentes públicos, se ponen a prueba las capacidades”.
-¿Por qué es necesario que los profesionales, sobre todo los que trabajan en el sector público, sepan cómo se hace la gestión pública, entiendan el diseño de las Tecnologías de Información y cómo se organizan las distintas administraciones, entre otros?
-Cada día más, el Estado, tanto en sus expresiones de gobierno central como local, requiere de mayores capacidades. La complejidad de su administración en los últimos años se ha ido complejizando, tanto para los servicios del tipo transaccional como los otros (más información en mi post “Servicios transaccionales y los no tanto en el Estado”). El soporte tecnológico asociado a los servicios que el Estado le entrega a sus ciudadanos, por su parte, es fundamental y hoy por hoy no se concibe diseñar e implementar servicios sin un adecuado soporte tecnológico. Existe una gran cantidad de servicios que requiere de plataformas tecnológicas de gran sofisticación, en términos de volúmenes de datos, usuarios y criticidad. Pensemos por un momento en servicios como Registro Civil, Chilecompra, SII, Fonasa y Dirección del Trabajo por mencionar algunos, las tecnologías involucradas van a depender mucho de su misión institucional (más información en post “Misiones institucionales y la TI”.
-¿Qué herramientas y conceptos aprenden los profesionales que cursan este Diplomado?
-El programa entrega herramientas en los diversos ámbitos de la gestión pública, esto es, planificación estratégica, procesos, diagnóstico organizacional y Tecnologías de Información (TI) y procesos, por mencionar algunos. En el caso de las TI, que es el tema al que me dedico, busco vincular los elementos propios del negocio con el soporte tecnológico que este debe tener. Se trata de analizar cómo las tecnologías pueden mejorar y potenciar el valor público de la institución, pasando por temas tales como Planificación Tecnológica, Diseño y Gestión de Proyectos Tecnológicos, Compras Públicas de TI, Transparencia y Datos Abiertos.
-¿Cómo una buena preparación académica para trabajar en el sector público permite evitar problemas serios como, por ejemplo, los conocidos “sobresueldos”? Además de modernizar adecuadamente el Estado, aumentando su productividad…
-Creo que uno de los elementos que están en el centro de la preocupación del programa es cómo se genera mayor valor público, poniendo para ello todas las herramientas disponibles a disposición e los alumnos. Si bien un programa como este no impide que se realicen malas prácticas, creo que las herramientas que se entregan permiten incorporar un mayor sentido de la responsabilidad y de servicio público.
-Este diplomado se dicta en versión abierta y cerrada. ¿Cuáles son las principales diferencias entre ambas?
-Diría que hay dos grandes diferencias y que cada una tiene sus ventajas y desventajas. El diplomado en su versión cerrada permite adaptar y usar casos para los trabajos con temáticas vinculadas directamente a la institución. Ya hemos desarrollado varas versiones cerradas, entre otras para la Contraloría General de la República y la Superintendencia de Electricidad y Combustibles. Adicionalmente, existe un mayor conocimiento entre los alumnos. Dos características que juegan en contra de la diversidad (perfiles profesionales y experiencias) que la versión abierta puede tener.
Fuente: Comunicaciones 2030